domingo, 19 de julio de 2015

Bytes versus Paper




El documento que les adjunto al final de este escrito trata sobre un tema que he venido comentando en publicaciones anteriores. En esta oportunidad hago especial mención al papel que juegan actualmente los periódicos como medio de comunicación tradicional en contraposición al surgimiento de las nuevas formas de informacion y comunicación tales como redes 2.0 e Internet.
la importancia que le han dado las sociedades modernas a las plataformas virtuales como herramientas de democratización y participación activa de los ciudadanos y ciudadanas en su quehacer político, económico, social y cultural y como una ventana con "mejor vista" para vislumbrar la realidad sin ningún tipo de sesgo subjetivo, ideológico o político-partidista.

Es precisamente lo obsolescencia de los medios impresos como referencia informativa lo que resalta el trabajo del cual les comento, cómo ha ido decayendo la influencia de los diarios en los consumidores o usuarios y de qué manera se ha ido acrecentando la participación directa; mediante comentarios, artículos, publicaciones, bloggs y demás formas de "opinión" de aquellos que antes no tenían "voz" hasta la revolución tecnológica del siglo XXI.

Hasta el rol del comunicador social y del periodista se han visto afectados por el surgimiento de prosumers (comunidades activas y participativas) donde un nuevo tipo de audiencia que deja de ser pasiva y que tiene acceso a la producción mediante el manejo de herramientas digitales y con mayor resonancia y distribución a lo largo del planeta, permiten agudizar el sentido de la participación y la critica ciudadana, desde una sociedad que está compuesta por usuarios que son a la vez productores y consumidores de contenidos y de informacion y que tienen como valor la cooperación; asunto que algunos autores advierten como peligroso por el riesgo de desarrollar una sociedad que este conectada y sea cooperadora desde el punto de vista global, pero que también sea impaciente, aislada y alejada de la realidad.

De esta manera se genera el debate entre los valores éticos y morales que deben caracterizar a un comunicador "certificado" tal como debería ser un periodista al momento de informar a diferencia de cualquier persona que decida opinar o dar su visión unidimensional acerca de cualquier situación o noticia, atentando, en la mayoría de los casos, contra la objetividad y la imparcialidad que debe caracterizar a un comunicador social.
Sin embargo, en Venezuela como en otros países hemos presenciado como los comunicadores sociales o periodistas de medios impresos, televisivos o radiales, narran noticias con un sesgo subjetivo, personal que puede responder a intereses políticos, económicos, culturales, religiosos o de cualquier otro tipo de los tantos que existen nuestras sociedades. De esta manera, los periodistas, al igual que los diarios impresos han perdido la seriedad o el reconocimiento por parte de los consumidores, ya que han ido aumentando los casos de palangrismo, amarillismo y partidismo que ejercen aquellos que cuentan con un espacio dentro de un canal de televisión, un informativo radial o un periódico de circulación regional o nacional.

La crisis de valores éticos y morales al momento de comunicar o informar, es una realidad que no escapa a ninguna persona, empresa o grupo de interés que intente posicionarse como referencia de veracidad y seriedad al momento de mostrar una noticia, tendencia u opinión acerca de una situación determinada. En ese sentido, lo mejor es verificar, una y otra vez, alguna noticia o informacion, agudizando el sentido critico, desconfiando de todo lo que oyes, lees o miras sin caer en la paranoia o el escepticismo social.

Chequea el documento completo en este link http://bit.ly/1KfrICb 
 ( busca la pag. 64 El caso de los medios, la reconfiguración del sentido de media y audiencia)